Creo que expresar nuestras emociones a través de palabras es la mejor manera de mantenernos saludables y vivir plenamente. Siempre tengo presente la famosa frase de Freud “Las emociones no expresadas nunca mueren. Los entierran vivos y luego salen peor”, por eso elegí ser psicoanalista. El psicoanálisis trae claridad y empoderamiento emocional a nuestras vidas.